Seminarios, cursos, conferencias, etc.
La Academia Mexicana de Impacto Ambiental, A.C.
(AMIA), invita al 3er. "Congreso Nacional de Impacto
Ambiental", del 25 al 27 de noviembre del 2019, en Centro Cultural
de la Universidad Autónoma de Yucatán (Calle 60 No. 57, Col. Centro), en
Mérida (Yucatán). Vean los detalles en: http://www.congresoamia.org.mx/
El
Instituto Nacional de Geoquímica (INAGEQ) loa invita al "XXIX Congreso
Nacional de Geoquímica", del 07 al 11 de octubre del 2019, en el Auditorio
Institucional del CICESE (Km. 106 Carr. Tijuana-Ensenada) en Ensenada (Baja California).
Vean
los detalles en:
El
Departamento de Microbiología Experimental (DBE) del Centro de Investigación
Científica y de Educación Superior de Ensenada, B.C. (CICESE) invita al
seminario "Estructura y función de los procariontes en las aguas profundas
del Golfo de México", por Selene Osorio, el 07 de agosto del 2019, a las
09:00 horas, en la sala de juntas del DBE del CICESE (Km. 106 Carretera Tijuana
a Ensenada) en Ensenada (Baja California). Entrada libre.
Pidan
informes a:
Seminarios
DBE (elizabethmedina@cicese.mx)
El
Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias
(INIFAP) y el Instituto Nacional de Pesca y Acuacultura (INAPESCA) los invita a
la "VI Reunión Nacional de Innovación Acuícola y Pesquera", en el
marco de las "Reuniones Nacionales de Investigación e Innovación Pecuaria,
Agrícola, Forestal y Acuícola Pesquera", del 23 al 26 de octubre del 2019,
en Tuxtla Gutiérrez (Chiapas).
Vean
los detalles en:
IUS
NATURA, Consultoría & Litigio, S.C., invita a la 5ª edición del curso
"Auditoría ambiental e identificación de riesgos", el 16 y 17 de
agosto del 2019 (16 horas), en el Aula Especializada Ius Natura (Mariano
Escobedo No. 16, Int. 10, Col. Centro) de Querétaro (Querétaro).
Pidan
informes a:
Diana
Enriquez (diana.enriquez@iusnatura.com.mx)
La
Sociedad Mexicana de Agricultura Sostenible, la Universidad Autónoma Chapingo y
Colegio de Postgraduados en Ciencias Agrícolas, los invitan al "XVI
Simposio Nacional sobre substancias vegetales y minerales en el combate de
plagas", el jueves 03 de octubre del 2019 en Departamento de Agroecología
de la Universidad Autónoma Chapingo (Carretera Federal México-Texcoco Km 38.5, Chapingo)
en Texcoco (Estado de México).
Pidan
informes a:
Cesáreo
Rodríguez (crhernan@colpos.mx)
BIOPROYECTA
Grupo Consultor Integral invita al taller "Cultivo hidropónico de
jitomate", a partir del 27 de julio del 2019, con sede en Serafín Olarte
#145 Col. Independencia, Alcaldía Benito Juárez, de la Ciudad de México. Cierre
de inscripciones 26 de julio del 2019.
Pidan
infores a:
Mariana
Luján (bioproyecta.contacto@gmail.com)
El
Colegio de la Frontera Sur (ECOSUR) invita al "Taller Latinoamericano de
Meiofauna", del 30 de septiembre al 05 de octubre del 2019, en el
auditorio de la biblioteca de su sede (Ave. del Centenario Km. 5.5) en Chetumal
(Quintana Roo). La fecha límite de inscripción será el 23 de septiembre del
2019.
Pidan
informes a:
Arely
Martínez (marce@ecosur.mx)
Varanus
komodoensis
El
dragón de Komodo (Varanus komodoensis), también llamado monstruo de Komodo y
varano de Komodo, es una especie de saurópsido de la familia de los varánidos,
endémico de algunas islas de Indonesia central. Es el lagarto de mayor tamaño del mundo, con una longitud
media de dos a tres metros y un peso de unos 70 kg. A consecuencia de su tamaño, son los superpredadores de los
ecosistemas en los que viven. A pesar de que estos lagartos se alimentan
principalmente de carroña, también cazan y tienden emboscadas a sus presas, que
incluyen invertebrados, aves y mamíferos. La primera vez que científicos
occidentales estudiaron los dragones de Komodo fue en 1910. Su excepcional
tamaño y su reputación de animal temible los convierte en uno de los animales
más populares de los zoológicos. En estado salvaje son una especie amenazada;
su ámbito de distribución se ha reducido debido a las actividades humanas y
están catalogados como vulnerables en la Lista Roja de la UICN. Están protegidos por la ley indonesia,
y un parque nacional, el Parque Nacional de Komodo, fue fundado en 1980 para
contribuir a su conservación.
La época de apareamiento comienza entre julio y agosto y la puesta de huevos en
septiembre. Depositan aproximadamente veinte huevos en nidos de megápodos
abandonados, y los incuban durante siete u ocho meses, hasta su eclosión en
abril, cuando los insectos son más abundantes. Los jóvenes son vulnerables, por
lo que suelen morar en árboles, a salvo de depredadores y adultos caníbales.
Tardan aproximadamente entre tres y cinco años en madurar, y pueden vivir hasta
unos cincuenta años. Estos lagartos se encuentran entre los pocos vertebrados
con capacidad de reproducción por partenogénesis, proceso por el que las
hembras pueden poner huevos viables en situaciones de ausencia de machos.
Los
nativos de la isla de Komodo se refieren a este animal como ora, buaya darat
(cocodrilo de tierra) o biawak raksasa (monitor gigante).
Aunque
los machos por lo general son de mayor tamaño, no hay diferencias morfológicas
obvias entre los sexos. Los jóvenes son de color verde con zonas amarillas y
negras y los adultos, con un tono opaco y uniforme, de color marrón a rojo
grisáceo. Sus cuerpos robustos están uniformemente cubiertos de ásperas
escamas. Es el lagarto de mayor tamaño del mundo, con una longitud media de dos
a tres metros y un peso de unos 70 kg. En la naturaleza, un adulto mide unos
2,5 m y pesa de media unos 70 kg, aunque los especímenes en cautividad a menudo pesan
más. El
espécimen
salvaje más
grande conocido midió
3,13 metros de longitud y pesó
166 kg (incluida la comida sin digerir). A consecuencia de su tamaño, son los superpredadores de los
ecosistemas en los que viven. Su inusual tamaño se atribuía generalmente al
gigantismo insular, ya que no hay otros animales carnívoros que puedan ocupar
el nicho ecológico de las islas en las que viven. Sin embargo, investigaciones
recientes sugieren que su gran tamaño se entiende mejor como un vestigio
aislado de una antigua población de grandes varánidos que vivían en Indonesia y
Australia, la mayor parte de los cuales, junto con otra megafauna, fue
descastada tras su contacto con los humanos modernos. Se han encontrado en
Australia fósiles
muy similares a V. komodoensis de más
de 3,8 millones de años
de antigüedad,
y su tamaño
permaneció
estable en Flores, una de las pocas islas indonesias donde se le puede
encontrar en la actualidad, desde que esta isla (junto con sus vecinas) fueron
aisladas por los crecientes niveles del mar hace unos 900.000 años.
Tiene
una cola fuerte y musculosa tan larga como su cuerpo, y aproximadamente 60
dientes serrados, que se cambian a menudo y que pueden medir hasta 2,5
centímetros de largo. Su saliva suele estar manchada de sangre, puesto que los
dientes están casi cubiertos de tejido gingival que se daña de forma natural
durante la masticación. Esto crea un cultivo ideal para las virulentas
bacterias que viven en su boca. Tiene una lengua larga y amarilla, marcadamente
bifurcada.
El
dragón de Komodo no tiene un sentido del oído particularmente agudo, a pesar de
sus visibles conductos auditivos, sólo es capaz de oír sonidos entre 400 y 2000
hercios. Es capaz de ver hasta una distancia de 300 metros, pero dado que sus
retinas sólo
contienen conos, se cree que tiene una pobre visión nocturna. Es capaz de percibir
el color, pero tiene una pobre discriminación visual de objetos inmóviles.
Usa
su lengua para oler, detectar sabores y percibir estímulos, al igual que otros
muchos reptiles, utilizando el órgano de Jacobson y que le ayuda a orientarse
en la oscuridad. Con la ayuda de un viento favorable y su hábito de balancear a su cabeza de
un lado al otro cuando andan, son capaces de descubrir carroña a distancias de
4 a 9,5 km. Las fosas nasales de estos animales no son de gran utilidad para
percibir olores, dado que carecen de diafragma. Tan solo cuenta con unas pocas
papilas gustativas en la parte de atrás de la garganta. Sus escamas, algunas de
las cuales están
reforzadas con hueso, tienen placas sensoriales conectadas con nervios que
facilitan su sentido del tacto. Las escamas alrededor de los oídos, labios, barbilla y planta de
los pies pueden tener tres o más placas sensoriales. Se creía que el dragón de
Komodo era sordo como consecuencia de un estudio que no mostró ninguna
agitación en ejemplares salvajes en respuesta a susurros, voces elevadas o
gritos. Este estudio fue cuestionado cuando una trabajadora del Zoológico de
Londres entrenó a un espécimen en cautividad del parque para salir a
alimentarse con el sonido de su voz, aun cuando el animal no podía verla.
El
dragón de Komodo prefiere lugares cálidos y secos, y suele vivir en prados
abiertos con hierbas altas y arbustos, sabanas y zonas bajas de bosques
tropicales, aunque también pueden encontrarse en otros hábitats como playas y
lechos secos de los ríos. Los jóvenes son arbóreos y viven en regiones
arboladas hasta los ocho meses de edad. Como animal ectotermo, es más activo
durante el día, aunque también manifiesta cierta actividad nocturna. Son
fundamentalmente solitarios, y sólo se reúnen para aparearse y comer. Son
capaces de correr a gran velocidad en breves carreras de hasta 20 km/h, de
zambullirse a una profundidad de 4,5 metros, y de escalar árboles con facilidad
cuando son jóvenes gracias a sus fuertes zarpas. Son buenos nadadores, y pueden
recorrer grandes distancias a nado para alcanzar islas vecinas. Para cazar
presas que están fuera de su alcance, puede ponerse de pie sobre sus patas
traseras usando la cola como apoyo. A medida que el dragón de Komodo madura, utiliza sus
garras principalmente como arma, dado que por su gran tamaño se vuelven poco prácticas para escalar. Para
refugiarse excavan madrigueras que pueden medir entre uno y tres metros de
ancho con sus potentes patas y zarpas delanteras. Debido a su gran tamaño y a su costumbre de dormir en
estas madrigueras, es capaz de conservar el calor corporal durante la noche y
minimizar el tiempo que tiene que tomar el sol durante la mañana. Caza
generalmente por la tarde, pero permanece a la sombra durante la parte más calurosa del día. Utilizan unos lugares
especiales de reposo, habitualmente situados en cornisas con una fresca brisa
marina, que están marcados con excrementos y limpios de vegetación y que
también sirven como un punto estratégico desde donde emboscar ciervos.
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Conservation Monitoring Centre (1996). «Varanus komodoensis». Lista Roja de
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